Entrega de actualidad técnica
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La eficiencia en el uso de la
energía fósil se está asumiendo cada vez con más interés en todos los sistemas
de producción agropecuaria. Se conoce y se puede deducir fácilmente que, el uso
de la energía fósil en la producción ganadera es mínimo en sistemas totalmente
pastoriles y máximo en sistemas estabulados. Sin entrar en comparaciones detalladas,
también sabemos que a medida que aumenta la eficiencia de cualquier sistema
(por ajustes, manejo, forraje más digestible, uso y control de efluentes, entre
otros) el costo de la energía fósil necesaria se reparte en más unidades
productivas o es reemplazada, en parte, en el mismo sistema. Es en el aumento
de la eficiencia que los Forrajes Conservados juegan un rol fundamental por la
seguridad y previsibilidad que le aportan al sistema productivo ante condiciones
climáticas desfavorables. En síntesis, por cada unidad de energía fósil
utilizada para producir henos y silajes, se logra la producción potencial o máxima posible acorde a lo
planificado e implementado.
El consumo de energía
fósil en los sistemas ganaderos es directo (mecanización) e indirecto (para
producir los fertilizantes y los alimentos que no provengan del pastoreo
directo). Con la intensificación de los sistemas que mencionamos en más de una
entrega, la utilización de la energía fósil es una necesidad inevitable para
mantener la intensificación. Pero también, como hemos visto en otras entregas,
se puede mejorar significativamente la eficiencia con sólo no perder de vista:
·
Los silajes, cuyos costos son menores a los
granos y concentrados
·
Las invernadas cortas para terminar novillos
·
La fibra efectiva de henos de alfalfa y de
los silajes en lechería
·
La reutilización de efluentes como enmiendas
·
La complementación entre agricultura y
ganadería
·
La mejora en la calidad de pastos, henos y
silajes
La reducción del consumo de
energía fósil o la mayor eficiencia por unidad de producto en el uso de la
energía, tiene margen de maniobra, ya que es posible en nuestros sistemas de
producción aplicar tecnologías de procesos que acompañadas por planificación y
complementación dentro de cada unidad de producción podrían lograr mayor
eficiencia productiva y sobretodo mucho mayor sustentabilidad que la actual. Y
allí, los forrajes conservados juegan un rol trascendental y estratégico.